Recientemente
la Consejería de Cultura ha abierto un expediente, a instancias de la Orden
Carmelita (Federación “Virgen del Carmen), donde esta comunidad solicita
desvincular y trasladar una serie de bienes muebles del convento sanluqueño,
entre los que se encontrarían el Cántico Espiritual de San Juan de la Cruz
(Códice de Barrameda), declarado BIC en 2013, y una carta autógrafa de Santa
Teresa, verdaderas joyas de Patrimonio de Sanlúcar. Resulta bastante insólita
esta petición cuando en estos momentos se está tramitando el expediente para la
declaración de Bien de Interés Cultura (BIC), que ya está finalizado hallándose
en su última fase.
La
Consejería ha dado traslado al Alcalde de esta petición para recabar su opinión
como “representante de la ciudadanía sanluqueña”. Aunque se desconoce la
respuesta de la Alcaldía, es de esperar que tanto el Alcalde Víctor Mora como
la Consejería de Cultura no permitan en modo alguno la salida de tales bienes
patrimoniales del convento, pues al otorgar esta autorización faltarían a sus
deberes de conservación del Patrimonio Histórico de Sanlúcar, como estipula la
Ley de Patrimonio Histórico Andaluz (2007).
La
orden carmelita alega que no tiene medios para conservarlos en Sanlúcar,
acogiéndose al Decreto
19/1995, de 7 de febrero. Sin embargo la posterior Ley de Patrimonio de
Andalucía de 2007 daba respuesta a esta circunstancia, en cuanto que prevé que en
caso de que los propietarios de bienes culturales no puedan conservarlos,
aunque es su principal deber (Art. 14), serán las administraciones públicas,
tanto el Ayuntamiento como la Consejería, los encargados de velar por la
preservación de tales bienes pudiendo adoptar medidas cautelares en casos de urgencia
y amenaza de pérdida (Art 4).
Cabe
recordar que en 2018, ante la inminente marcha de las religiosas de Sanlúcar,
varias entidades culturales pusieron en marcha una campaña ciudadana y
manifiesto, que fue apoyado por 25 colectivos ciudadanos y las firmas de 4.500
personas. El Manifiesto y los resultados de la campaña fueron remitidos a las
pertinentes administraciones civiles y religiosas, desembocando en la Resolución
de 21 de junio de 2018, de la Dirección General de Bienes Culturales, “por la
que se incoa el procedimiento para la inscripción en el Catálogo General del
Patrimonio Histórico Andaluz como Bien de Interés Cultural, con la tipología de
Monumento, del Convento de Santa Teresa, en Sanlúcar de Barrameda”. Desde esta
fecha todos los bienes muebles del convento quedaron vinculados al inmueble, de
forma que no se puede sacar nada de él sin “autorización expresa” de la
Consejería. Sin embargo y a pesar de la incoación, varias personas vieron sacar
bienes muebles del convento en agosto del año pasado, cuyo hecho está por
verificar.
Al
parecer la orden carmelita pretende vender el inmueble para destinarlo a uso
hotelero o turístico, según lo manifestado por el Sr. Juan Dobado, responsable
de patrimonio de la orden de los Carmelitas, en Diario de Cádiz de 31 de
octubre de 2018, quien afirmó entonces que había empresas interesadas en
explotar el convento, para hacer rentable el edificio al tiempo que
garantizaría su conservación, “pues la iglesia y el museo se conservarían tal
cual”. Estas palabras se contradicen claramente con la reciente petición
realizada a la Junta.
Las
asociaciones culturales ASEHA y Aula Gerión exigen a la Consejería de Cultura y
al Ayuntamiento que cumplan con sus deberes y responsabilidades legales de
preservar el monumento en su integridad y no permitan sacar ningún bien mueble
del convento. En caso de producirse dicha autorización, cabría interponer
recurso contencioso-administrativo o cualquier otra forma legal contra la
Consejería y el Ayuntamiento, a lo que están dispuestos varios colectivos
culturales de la ciudad, aunque esperan que no se tenga que llegar a este
extremo, pues no se puede permitir que se pierda este importante eslabón de la
historia y el arte de Sanlúcar de Barrameda.
